La interdisciplina en la Educación Ambiental
Relatoria: 24 de Abril de 2010.
Para iniciar esta segunda sesión, diré que una de las muchas cualidades de nuestra asesora, la maestra Ana Miriam, es la de ser puntual. Eso contagia la disposición que tiene para trabajar con este grupo, compuesto en mayoría por docentes en el nivel secundaria, aunque cada vez somos menos, pero no importa, ya que aún así hacemos un buen equipo de trabajo.
El día de hoy abordamos “La interdisciplina en la educación ambiental” y llegamos a las siguientes conclusiones: ésta trasciende el ámbito escolar, pues puede ser abordada por todas las agrupaciones sociales incluyendo los medios de comunicación, aunque en mi opinión, generalmente los medios nos llevan al consumismo y por ende a una mayor contaminación.
La interdisciplina, es un grado superior del conocimiento, que requiere de las disciplinas individuales para fortalecerse.
Se enfatizó sobre la planificación curricular que desvaloriza lo educativo y que sólo busca producir.
Se aclaró que en el enfoque por competencias lo primordial es el saber hacer y la actitud y los valores que conllevan.
La interdisciplina significa el uso de un lenguaje común entre distintas disciplinas, pero a la vez el respeto por cada una de éstas, la investigación previa, una planificación curricular y un método y programa integrador. Así pues, la enseñanza interdisciplinar, se divide entre saberes y haceres (competencias).
Eran las 11:30 a. m., cuando salimos a tomar un receso, al término de ésta, plasmamos mediante un dibujo, la problemática ambiental más importante para nuestra bina, las cuales se refirieron al uso de productos CFCs, contaminación de suelo, por exceso de basura, al del aire, por efectos de las fábricas y automóviles, dando origen al efecto invernadero y lluvia ácida. Al deshielo en los polos, con las consecuentes variantes climáticas. Entre las propuestas que se dieron para evitar están el uso mínimos del automóvil, la afinación de éstos. Disminuir productos en aerosol y desde luego los buenos hábitos para depositar y reciclar la basura, evitando el uso de bolsas de plásticos. Además surgió la idea de elaborar productos no contaminantes que sean útiles en el hogar como jabones biodegradables, gel antibacterial, entre otros. Todo esto para la Demostración de lo aprendido que ya desde hace unos 5 años aproximadamente se dan en este Centro de Maestros de Tecamachalco, reafirmando aún más el compromiso que se tienen con los docentes de la región y que lo hace único entre los demás Centros de Maestros. Además por primera vez, haremos un blog, para mostrar las evidencias de los trabajos que sesión con sesión realizamos. La asesora, también nos reiteró a leer nuestros materiales, para poder hacer verdaderos espacios de reflexión y crítica en torno a la problemática ambiental.
Eran las 14:40 horas, cuando se dio por concluidos los trabajos de esta segunda sesión.
María Margarita Rocha Pérez
martes, 4 de mayo de 2010
Reflexiòn sobre educación ambiental
Reflexión sobre educación ambiental
La educación ambiental es un proceso pedagógico dinámico y participativo, que busca despertar en la población una conciencia que le permita identificarse con la problemática Ambiental tanto a nivel general (mundial), como a nivel especifico (medio donde vive); Busca identificar las relaciones de interacción e independencia que se dan entre el entorno (medio Ambiente) y el hombre, así como también se preocupa por promover una relación armónica entre el medio natural y las actividades antropogénicas a través del desarrollo sostenible, todo esto con el fin de garantizar el sostenimiento y calidad de las generaciones actuales y futuras.
Por ello, las acciones que se tomen, han de considerar las diferentes culturas que existen en el mundo, pues la forma de pensar y de concebir el mundo, repercute directamente en la conducta para preservar o deteriorar aún más nuestro medio ambiente. Y no cabe duda que los problemas ambientales tienen ya una dimensión mundial. Puesto que la degradación ambiental es resultado de las formas de conocimiento a través de las cuales la humanidad ha construido el mundo y lo ha destruido por su pretensión de universalidad, generalidad y totalidad; en otras apalabras, se destruye el mundo no por ignorancia sino por falta de conciencia, porque no se analiza lo destructivo de nuestras acciones, que en cadena origina la sinergia.
El desarrollo del conocimiento no trasciende la ignorancia en una "dialéctica de la iluminación", sino que va generando sus propias sombras, sus áreas de desconocimiento, por consiguiente, el primer paso para abatir los problemas ambientales, se a de dar en el marco de la educación que desde el seno familiar recibe el ser humano.
Como docentes, tenemos un gran compromiso, que considero debe darse primordialmente en la formación que en la información. La práctica de los valores como la responsabilidad, la solidaridad, el amor, entre otros debe reflejarse desde nuestra persona. Con nuestras actitudes y comportamiento hemos de convencer y de persuadir a nuestros alumnos a luchar por conservar la naturaleza y las relaciones entre los ecosistemas más que con falsos discursos.
Creo que como docente de Telesecundaria, podemos abordar la problemática ambiental desde todas las asignaturas, es decir haciendo uso de la transversalidad.
Para ello, debemos hacer un diagnóstico de las problemáticas ambientales de nuestro entorno inmediato, y realizar una planeación con la finalidad sino de resolverlos, por lo menos de disminuirlos. Involucrar a los alumnos directamente, porque es necesario, despertar su “ conciencia ecológica “.
Una estrategia a seguir es la investigación como herramienta, para que se conozca su importancia, causas y consecuencias por ejemplo del desperdicio del agua, y hacer inferencias sobre lo que sucederá a futuro.
El juego y la simulación son recursos didácticos muy usados en los cursos de educación ambiental, pero éstas deben llevar a la reflexión y cuestionamiento, es decir deben llegar a un juicio valorativo del problema en cuestión y hacer que de ella se desprendan acciones concretas para disminuir este problema.
Pero esas acciones no deben quedar ahí, sino trasladarlas a casa de nuestros alumnos, para que tenga repercusión directa en la comunidad y que se verá reflejado indudablemente en un cambio de hábitos y actitudes así como en el pensamiento.
María Margarita Rocha Pérez (Abril 17 de 2010)
La educación ambiental es un proceso pedagógico dinámico y participativo, que busca despertar en la población una conciencia que le permita identificarse con la problemática Ambiental tanto a nivel general (mundial), como a nivel especifico (medio donde vive); Busca identificar las relaciones de interacción e independencia que se dan entre el entorno (medio Ambiente) y el hombre, así como también se preocupa por promover una relación armónica entre el medio natural y las actividades antropogénicas a través del desarrollo sostenible, todo esto con el fin de garantizar el sostenimiento y calidad de las generaciones actuales y futuras.
Por ello, las acciones que se tomen, han de considerar las diferentes culturas que existen en el mundo, pues la forma de pensar y de concebir el mundo, repercute directamente en la conducta para preservar o deteriorar aún más nuestro medio ambiente. Y no cabe duda que los problemas ambientales tienen ya una dimensión mundial. Puesto que la degradación ambiental es resultado de las formas de conocimiento a través de las cuales la humanidad ha construido el mundo y lo ha destruido por su pretensión de universalidad, generalidad y totalidad; en otras apalabras, se destruye el mundo no por ignorancia sino por falta de conciencia, porque no se analiza lo destructivo de nuestras acciones, que en cadena origina la sinergia.
El desarrollo del conocimiento no trasciende la ignorancia en una "dialéctica de la iluminación", sino que va generando sus propias sombras, sus áreas de desconocimiento, por consiguiente, el primer paso para abatir los problemas ambientales, se a de dar en el marco de la educación que desde el seno familiar recibe el ser humano.
Como docentes, tenemos un gran compromiso, que considero debe darse primordialmente en la formación que en la información. La práctica de los valores como la responsabilidad, la solidaridad, el amor, entre otros debe reflejarse desde nuestra persona. Con nuestras actitudes y comportamiento hemos de convencer y de persuadir a nuestros alumnos a luchar por conservar la naturaleza y las relaciones entre los ecosistemas más que con falsos discursos.
Creo que como docente de Telesecundaria, podemos abordar la problemática ambiental desde todas las asignaturas, es decir haciendo uso de la transversalidad.
Para ello, debemos hacer un diagnóstico de las problemáticas ambientales de nuestro entorno inmediato, y realizar una planeación con la finalidad sino de resolverlos, por lo menos de disminuirlos. Involucrar a los alumnos directamente, porque es necesario, despertar su “ conciencia ecológica “.
Una estrategia a seguir es la investigación como herramienta, para que se conozca su importancia, causas y consecuencias por ejemplo del desperdicio del agua, y hacer inferencias sobre lo que sucederá a futuro.
El juego y la simulación son recursos didácticos muy usados en los cursos de educación ambiental, pero éstas deben llevar a la reflexión y cuestionamiento, es decir deben llegar a un juicio valorativo del problema en cuestión y hacer que de ella se desprendan acciones concretas para disminuir este problema.
Pero esas acciones no deben quedar ahí, sino trasladarlas a casa de nuestros alumnos, para que tenga repercusión directa en la comunidad y que se verá reflejado indudablemente en un cambio de hábitos y actitudes así como en el pensamiento.
María Margarita Rocha Pérez (Abril 17 de 2010)
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